Pamela era una escort-amiga que se retiró hace un tiempo y que se fue al sur. Hermosura exquisita de pelo negro rizado, un cuerpo todo natural increíble 90-60-90 y piel morena infartante. En los años en que nos encontrábamos, dos veces antes habíamos hecho tríos, pero no hubo mucha interacción entre ellas.
Hasta que una vez la llamo para coordinar, y me dice que había tenido una conversación con unas amigas (que creo que no sabían de sus actividades lado B) en las que varias de ellas le habían dicho que ya habían hecho tríos con todo pasando y al estilo de "wna, como erí tan pava! No le hai comido la concha a nadie? no tiene nada de lésbico eso!"
Así que su puso curiosa, y como yo era de confianza me preguntó si me animaba. Ni wn! Cual caballero que soy me ofrecí para coordinar todo.
Contacté a otra chica en este mismo portal, de Paraguay. No recuerdo el nombre.
Fue maravilloso. Después me dijo que no hay como que otra mujer le haga sexo oral. Y después verla a ella comiéndose a la paraguaya, todavía tengo esa imagen grabada en mi mente. Al final yo le daba a Pamela en cuatro mientras la chica le estimulaba el clítoris con los dedos. Tuvo un orgasmo largo y con harto volumen. Después Pamela me chupó hasta que acabé en su boca. RRRiiiccoooo.
Lo entretenido fue que, más que me atendieran a mi, tanto la escort paraguaya y yo nos ocupamos de Pamela, y estuvo formidable.
En cierta forma, se puede decir que en este caso fui una herramienta para el placer de ella... y no me quejo para nada.